No se trata de un simple truco: va más alla. El "este es mi piso" es propio de un estratega. Concidiones sine qua non:
- Conseguir algo parecido a una cita con una chica (a poder ser) y en jueves noche: es importante que en aras de alcanzar tal cita utilicemos la expresión "tomar unas cañas". No compromete ni indica demasiado de nuestras intenciones, no es cursi, y es más barato que invitarla a cenar.
- Deshacerte de la manada esa noche. Esto no restultará complicado, ya que la manada de las hienas, cuando un componente de la misma se pone enfermo y decide no salir ese día, se alegra y se llena de euforia, ya que lo ve como un rival menos con el que competir.
- El tercer requisito es vivir en Santiago (u otra ciudad) centro y tener el piso disponible.
- Conocer algún bar cercano a tu piso.
- Adecuar la decoración del piso: si hemos quedado con una chica romántica prepararemos unas flores y las colocaremos en el recibidor de nuestro piso; si la chica es rockera haremos lo propio con algún disco de Elvis (los clásicos le gustan a todo el mundo y si no no merece la pena); si es pija y le gusta la moda, colocaremos nuestro mejor traje sobre el sofá del salón; si le gusta el cine, una pelicula...
- Preparar un horario en el que diga que tienes clase en las primeras horas de la mañana que te servirá de pretexto para echarla de casa si es tonta. Por otra parte, si resulta ser maja, siempre pensará que eres un tío responsable que vas a clase los viernes por la mañana.
Estos requisitos son suficientes. Y alguno de ello un tanto superfluo. La base del "este es mi piso" es la siguiente:
- Quedas con la chica bastante lejos de tu piso, en algún bar con cierta clase y en el que sirvan cerveza. Depués poco a poco, caña a caña, de bar en bar, os vais acercando a tu piso. Si la chica no es de Santiago o conoce poco, mucho mejor, pues no propondrá ningún lugar que se desvíe de nuestro camino. Sin olvidarte de disfrutar de tu cita, de ir tonteando, pero con control, propones cuando son en torno a las 2:00 de la mañana ir a un bar que debe estar cerca de tu piso. Tomais las últimas en ese local y cuando la notas con algo de chispa, sólo en ese punto simulas un bostezo y le dices: "bueno... mañana tengo clase, ¿nos vamos?". Ella, si estaba interesada en ti, se sentira decepcionada. Salís del bar con premura y te dirijes, sin que ella pregunte nada (debes hablar de algo) hacia tu portal. Cuando llegas le dices: bueno... este es mi piso, aquí nos despedimos, a no ser que quieras subir y tomamos la última copa. Entre la sorpresa de que vivieses al lado o justo en frente del local y las 6 o 7 cañas que llevará, existe una alta probabilidad de que su respuesta sea afirmativa. Una vez dentro le enseñas aquello que hayas preparado, y le dices que tienes que ver tu horario para ver a qué hora tienes clase el viernes (que está en tu habitación). Alea iacta est.
PD1: como habréis visto se trata de la variante glamourosa (y con cañas de por medio) del "Este es mi coche" que expondremos en un futuro (aunque como es lógico, tendrá algunas variantes).
PD2: Si decides echarla por la mañana de tu cama, por favor, sé un hombre y acompáñala a la puerta.
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